Inspiración Conjunto Olivo

Este conjunto es un homenaje al olivo, a su fruto y su producto más preciado: el aceite, conocido como oro líquido. Éste es un árbol cuyos elementos eran fundamentales para las culturas del Mediterráneo. Por ejemplo, el aceite se usaba como combustible para lámparas, para cocinar o como ungüentos. En las polis griegas una corona de olivo era la distinción que se concedía a los ganadores de los Juegos Olímpicos.

Hispania, el nombre por el que se conocía la península ibérica en la época romana, se proclamó auténtica reina de la producción y exportación del aceite, sobre todo la provincia de la Bética. Tanto que en la Ciudad Eterna existe un monte, conocido como Monte Testaccio, formado con los restos de las ánforas que contenían el aceite hispano y llegaba a la capital del imperio, donde se consumía y se distribuía al resto de provincias.

La representación del olivo en el arte de estas culturas muestra la importancia de este árbol para ellas: restos de olivo encontrados en tumbas egipcias, además de encontrar numerosas expresiones artísticas de sus ramas y frutos en sus relieves; los frescos en el palacio de Knossos en Creta; o las imágenes del proceso de producción del aceite en ánforas griegas de figuras negras y su uso como motivos decorativos. 

Es por esto que hemos decidido homenajear a las culturas mediterráneas en general, creando este conjunto que representa una gota de aceite y olivas que caen de ella, culminando en una hoja de olivo y un sello en positivo de una rama de olivo.